A veces realmente me siento ignorada. Quizás sean paranoias mías. Quizás no.
A veces me siento tan sola, y te echo tanto de menos, que sería capaz de ir a buscarte a donde fuera solo para decirte los motivos por los que te quiero, y podría decirte bastantes, creeme.
Pero no lo hago, no me atrevo a mandarte ni un mensaje porque no me siento correspondida. Lo sé, en la teoría me quieres pero, ¿y en la práctica? Siento que tienes mejores cosas que hacer que hablar conmigo, que te cansas de mí si te envío muchos mensajes, que me ignoras a propósito porque no quieres hablar conmigo, que no me escuchas, que no te importa lo que digo, que no te importo yo.
No se lo que sientes, sé lo que me dices que sientes, y no me fío. No después de las hostias que me di con la realidad en situaciones similares.